Un médico del centro penitenciario de Ponent, de Lleida, se encuentra hospitalizado desde hace 10 días con varias costillas rotas y un hematoma pulmonar, como resultado de la trifulca que mantuvo con los Mossos d'Esquadra a la salida de un bar musical de la ciudad, donde momentos antes había discutido con su novia. El médico, que usaba muletas por una operación en la pierna, denunciará a los agentes por agresión.
El incidente se produjo a las tres de la madrugada del pasado día 9, en plena fiesta mayor de Lleida, cuando el facultativo de la prisión J. R. P. y su compañera se encontraban de copas. En cierto momento ambos iniciaron una acalorada discusión y los camareros obligaron a la pareja a abandonar el local.
Al llegar a la calle les esperaban cuatro mossos. Lo que ocurrió a partir de ese momento difiere según las versiones. Mientras que la pareja afirma que, sin mediar palabra, los agentes empezaron a golpearles hasta que fueron esposados, fuentes de la policía autonómica sostienen que el médico y su novia se encontraban en estado ebrio y muy alterados, y que al intentar calmarles reaccionaron violentamente y tuvieron que detenerles. Según esta versión, el médico se produjo las lesiones al caer al suelo y golpearse contra el bordillo durante el forcejeo.
El médico, que tiene previsto denunciar a los Mossos d'Esquadra por agresión, detención ilegal, lesiones y abuso de autoridad, fue trasladado al hospital Arnau de Vilanova de Lleida para ser atendido de las lesiones, donde continúa hospitalizado con cuatro costillas rotas y un hemotórax.
Por su parte, los Mossos d'Esquadra detuvieron al médico y a su compañera por un delito de atentado contra agentes de la autoridad y resistencia, pero ambos quedaron en libertad.
* Este artículo apareció en la edición impresa del Jueves, 20 de mayo de 2004