La sección octava de la Audiencia Provincial de Cádiz condenó ayer a 41 años de cárcel al joven entrenador de fútbol de Jerez acusado de abusar de los niños de entre 9 y 12 años a los que preparaba en las barriadas de La Milagrosa y La Pita. La sentencia le imputa varios delitos de agresión sexual, abusos, exhibicionismo y corrupción de menores y presenta como principal prueba los testimonios de los niños que acudieron como testigos al juicio celebrado hace poco menos de dos semanas en Jerez.
El abogado de la defensa, Pedro Pérez, mostró ayer su decepción y disconformidad con el contenido del fallo judicial y anunció un recurso ante el Tribunal Supremo. "Ha sido una sentencia donde el único material probatorio de cargo es la declaración de los menores y por eso vamos a seguir adelante, porque hemos perdido la primera parte pero todavía queda la segunda y la prórroga", declaró Pérez.
El letrado de la acusación particular, Daniel Barba, habló, por su parte, de una sentencia "clarificadora" y dijo tener la satisfacción del deber cumplido. "El testimonio de los niños ha sido de tal entidad, claridad y rotundidad que sustenta la condena del imputado por los delitos tan graves de los que se le acusaba", indicó Barba, quien no cree que prospere el recurso de la defensa.
* Este artículo apareció en la edición impresa del Viernes, 21 de mayo de 2004