No hay ningún coche tan bien pensado para la ciudad, al menos si no se necesitan más de dos plazas. El Smart Fortwo (para dos, en inglés), que es como se llama ahora, mide sólo 2,5 metros de largo, el tamaño justo para aparcar en esos huecos que quedan libres porque no cabe ningún otro modelo. Ofrece dos buenas plazas con asientos grandes y cómodos, y un maletero para la compra. Sus mecánicas de gasolina y turbodiésel aportan unas prestaciones correctas y gastan lo justo. Y el equipo de seguridad de serie incluye casi todo lo importante: doble airbag, ABS, ESP...
El Smart es caro para su tamaño, pero ofrece unas cualidades prácticas imbatibles en la ciudad.
* Este artículo apareció en la edición impresa del Sábado, 22 de mayo de 2004