Los representantes que salgan de las urnas en estas elecciones al Parlamento Europeo tendrán en la lucha contra el desempleo uno de sus principales retos, máxime tras la incorporación de 10 socios del Este. Seis de ellos tienen tasas de paro superiores a la media de la UE, que se situaba en el 8% antes de la última ampliación. Las mujeres sin trabajo en la Europa de los 25 suponen el 9,95% de la población activa, mientras que en el caso de los hombres la proporción es del 8,4%. Según datos de Eurostat, la oficina estadística comunitaria, este fenómeno afecta de forma significativa a los menores de 25 años, entre los que se observa una tasa de paro que ronda el 18%. Los 10 nuevos socios aportan una abultada cifra de población desempleada. El 10,14% de sus ciudadanos no tiene trabajo, lo que eleva la media europea por encima del 9%, unos 40 millones de personas. De los antiguos 15 socios, España (11,2%) presenta la tasa de paro más alta, seguida de Francia (9,5%), Alemania y Grecia (9,2%), y Finlandia (9%). Mientras que Luxemburgo (3,9%) y Holanda (4,3%) presentan los índices más bajo de paro. Entre los nuevos miembros destaca, en negativo, el 19,1% de Polonia, el 16,6% de Eslovaquia, y el 11,9% de Lituania. Las mejores cifras de ocupación las presentan Chipre y Hungría, con menos del 6% de su población desempleada. Tras la ampliación, España pasó a convertirse en el cuarto país de la UE en tasa de paro.
MÁS INFORMACIÓN
* Este artículo apareció en la edición impresa del Sábado, 29 de mayo de 2004