Una treintena de personas murieron ayer a consecuencia del terremoto que sacudió a varias provincias del norte de Irán, al que siguieron varios temblores. La televisión estatal iraní informó de 12 muertos y 66 heridos en la provincia de Mazandarán, que es una de las más afectadas, junto a las de Qazvin y Teherán. En Qazvin hubo otras 20 víctimas mortales, según Noor Bahks, director de Relaciones Públicas de la Asociación de la Media Luna Roja. Al parecer, hay decenas de aldeas destruidas, aunque las informaciones que llegaron anoche eran fragmentarias. El Instituto Geofísico de Teherán situó la intensidad del temblor en 5,5 grados de la escala de Richter, pero otros institutos en Europa y de EE UU la elevaron hasta los 6,2 grados.
* Este artículo apareció en la edición impresa del Sábado, 29 de mayo de 2004