Dos personas, de un total de 18 detenidos, ingresaron ayer en prisión acusados de explotación de inmigrantes y falsificación de documentos. Fueron agentes de la policía de la comisaría de Torrent los que desarticularon el jueves una red que desde hacía más de un año se dedicaba a favorecer la inmigración ilegal, facilitando a los extranjeros documentos falsos para regularizar su estancia. La investigación se inició el pasado verano, después de la detención de un hombre de nacionalidad colombiana que trataba de darse de alta en la seguridad social con documentación falsa. La policía se incautó de impresoras, ordenadores, programas informáticos, sellos de caucho, tarjetas de residencia falsas. Los agentes creen que han podido falsificar permisos de residencia y trabajo previo pago de los inmigrantes que contraían así una deuda con los dos capos de la red ahora detenidos.
* Este artículo apareció en la edición impresa del Sábado, 5 de junio de 2004