La Universidad de Verano de Teruel (UVT) puso el pasado 17 de junio en marcha la segunda parte del curso sobre la Defensa de los Derechos del Consumidor que tratará de forma monográfica la Agencia de Seguridad Alimentaria, un organismo dedicado a detectar y cuantificar el riesgo sanitario en materias relacionadas con la alimentación.
En este nuevo curso, participan el catedrático de Patología Animal de la Facultad de Veterinaria de la Universidad de Zaragoza, Juan José Badiola, que es el presidente de la Agencia Aragonesa de Seguridad Alimentaria y el director general de Salud Pública de la DGA, Luis Gómez, entre otros muchos profesores.
Así, se van a desarrollar una serie de conferencias en el Aula de Grados de Escuela Universitaria Politécnica, abiertas a todo el público, que girarán entorno a la seguridad alimentaria y a los últimos escándalos como el de las vacas locas y las dioxinas en los pollos. Unos casos que hicieron necesaria la creación de las agencias de seguridad alimentaria como garantes de los derechos de los consumidores.
Estas Agencias deben cubrir los vacíos existentes en el ámbito de la seguridad alimentaria. Deben estar dotadas de total independencia para que sus evaluaciones sean transparentes y rigurosas. Uno de sus principios de actuación es la rapidez, dado que en estos casos es muy importante atajar el problema y buscar soluciones de forma inmediata.
Es imprescindible que exista un flujo de comunicación entre las agencias alimentarias de todos los países para poder intercambiar información sobre riesgos alimentarios. Por eso, se hace necesario que estos organismos estén en estrecha relación con las distintas estructuras de sanidad e inspección de alimentos existentes.
* Este artículo apareció en la edición impresa del Jueves, 17 de junio de 2004