El Tribunal Supremo ha establecido en una sentencia sobre tráfico de drogas que el examen de la basura doméstica en una investigación policial no es una vulneración del derecho a la intimidad. El origen del debate sobre la violación o no de un derecho fundamental está en la detención, procesamiento y posterior condena de dos narcotraficantes en Castellón en 2002 después de que cuatro años antes la Guardia Civil los relacionara con un delito contra la salud pública después de una vigilancia que incluyó la revisión de los restos que ambos arrojaban al contenedor. En dos bolsas los agentes hallaron varios kilos de cocaína.
* Este artículo apareció en la edición impresa del Viernes, 18 de junio de 2004