El Gobierno cubano liberó sorpresivamente el 18 de junio a dos disidentes del grupo de los 75, condenados el año pasado a severas penas de prisión por "conspirar" con EE UU, con lo que son ya ocho los opositores excarcelados por las autoridades en las últimas semanas. Los liberados con "licencia extrapenal" debido a su delicado estado de salud son Carmelo Díaz Fernández, de 67 años de edad, y Orlando Fundora Álvarez, de 47. Díaz fue condenado a 16 años de cárcel y Fundora a 18 en los juicios sumarísimos de abril de 2003, que desataron una ola de protestas en todo el mundo.
Hasta el momento las autoridades han puesto en libertad a cuatro opositores del grupo de los 75 -los otros son Julio Antonio Valdez Guevara y Miguel Valdés Tamayo-. Otros cuatro disidentes que estaban en espera de juicio o sancionados con penas menores fueron liberados recientemente. La noticia fue recibida como un "gesto positivo" por la oposición y por varios embajadores de la UE. A raíz de las condenas, la Unión decretó una serie de sanciones diplomáticas. Según el opositor Elizardo Sánchez, las excarcelaciones son positivas pero insuficientes, pues quedan más de 300 presos políticos. "Son decisiones pragmáticas. El Gobierno da respuesta a ciertos casos que han llamado la atención, pues podían morir en la prisión o poniendo al día su agenda de pendientes ", manifestó Sánchez en un comunicado.
Varios embajadores europeos consideraron que las excarcelaciones suponían un "cambio de matiz y de rumbo" por parte de las autoridades, hasta ahora partidarias de no hacer concesiones ni "gestos" de buena voluntad.
* Este artículo apareció en la edición impresa del Lunes, 21 de junio de 2004