La oposición, CiU y el PP, reclamó ayer al alcalde de Barcelona, Joan Clos, que dé la cara y que alguien asuma responsabilidades políticas tras la sentencia que condena al Ayuntamiento de Barcelona por la pasividad e ineficacia mostradas en evitar el ruido que provocaba un bar en Gràcia.
La sentencia, emitida por el Juzgado de lo Contencioso Administrativo número 1 de Barcelona el pasado 10 de junio, condena al municipio a indemnizar a los vecinos afectados y afirma que se pudo comprobar "la inactividad en el ejercicio de las potestades de policía y disciplina ambiental que corresponde al Ayuntamiento", lo que vulnera los derechos fundamentales de los recurrentes reconocidos en los artículos 15 y 18 de la Constitución. Xavier Trias, líder del grupo de CiU, reclamó ayer que Clos depure responsabilidades políticas por este asunto y denunció que el Gobierno municipal no combate el ruido que sufren los ciudadanos. Alberto Fernández (PP) acusó directamente a Imma Mayol (ICV). Ésta replicó que la actitud del PP es "desmesurada". "Acepto que hay cosas a mejorar, pero no puede decirse que no se haya hecho nada", dijo.
* Este artículo apareció en la edición impresa del Martes, 6 de julio de 2004