El filme colectivo Hay motivo fue presentado ayer por la mañana en París en una de las salas del Cine de los Cineastas, así como, luego, en sesión abierta a un público muy numeroso, en un cine céntrico de la capital francesa. El productor Andrés Santana, algunos de los cineastas que firman los 32 cortometrajes -Imanol Uribe, José Luis Cuerda y David Trueba-, así como Diego Galán en tanto que realizador del epílogo, acudieron a las proyecciones y debatieron con los espectadores sobre la significación del proyecto. Manuel Pérez Estremera, director general del Instituto de las Ciencias y las Artes Audiovisuales de España (ICAA), también asistió a los pases y luego se entrevistó con su homólogo francés, David Kessler.
La ministra de Cultura, Carmen Calvo, acudió al Ayuntamiento de París para entrevistarse con el alcalde de la ciudad y para preparar un próximo encuentro con su homólogo Renaud Donnadieu de Vabres, con el que quiere debatir sobre la excepción cultural y la hipotética estrategia conjunta a seguir en su defensa.
La gran mayoría de preguntas de los espectadores relativas a la realidad social y política evocada en Hay motivo giraron sobre la magnitud de las manipulaciones informativas protagonizadas por Televisión Española. El contraste escandaloso entre las preguntas, afirmaciones y promesas de José María Aznar como candidato y la realidad de su actuación como presidente de Gobierno también suscitaron sorpresa entre una platea relativamente convencida de los éxitos económico-políticos del anterior Ejecutivo del PP.
El encuentro entre los sectores cinematográficos francés y español también sirvió para tender los puentes de una importante presencia hispana en las próximas conversaciones de Beaune, ciudad francesa en la que, a finales de otoño, se reunirán cineastas de medio mundo para discutir cuestiones de urgencia relativas a la supervivencia del sector.
Beaune ha servido para elaborar una estrategia audiovisual europea frente a Estados Unidos, para repensar las relaciones entre cine y televisión o para discutir también con los principales representantes de la industria de Hollywood. Son muchos los ministros de Cultura o responsables del sector audiovisual que han desfilado por Beaune a lo largo de un fin de semana que se traduce en la elaboración de un documento y, a veces, en la asunción colectiva de una serie de reivindicaciones que luego serán presentadas ente las autoridades comunitarias.
* Este artículo apareció en la edición impresa del Martes, 6 de julio de 2004