Hasta ayer tenía mis dudas sobre qué votar en el probable referéndum sobre la Constitución europea, pero después de oír las lúcidas declaraciones de Aznar, ya lo tengo claro: no. No a una Constitución que supone relegar a España a un papel secundario, y no a una Constitución que no recoge la raíz cultural cristiana de Europa.
Tampoco creo que haya que regalar la baza del sí a un Rodríguez Zapatero que se ha comportado como un charlatán en un tema tan fundamental como la retirada de las tropas de Irak. Resulta que España debe retirarse de Irak, y debe de ir a Afganistán a correr los mismos riesgos a cambio de nada. Y los burlados a los que se nos llamó asesinos por defender la postura de Aznar ¿debemos comulgar con rueda de molino y decir que sí? No y rotundamente No.
Nadie va a votar PP para que llegue a un acuerdo de modificar el Senado y la Constitución Española. Para la huida y la claudicación ya está el PSOE.
* Este artículo apareció en la edición impresa del Jueves, 8 de julio de 2004