La Comunidad de Madrid ha decidido a última hora transmitir hoy en directo a la plaza de Oriente la ópera Tosca, de Giacomo Puccini, que se representa hasta este viernes en el vecino Teatro Real, con dirección escénica de Núria Espert. Una pantalla gigante y 2.000 sillas han sido instaladas para que los asistentes puedan disfrutar de manera gratuita de este espectáculo, que empieza a las 20.00.
Entre los objetivos del Gobierno de regional con esta decisión está "fomentar las actividades culturales y hacerlas accesibles al mayor número posible de ciudadanos", argumenta su consejero de Cultura y Deportes, Santiago Fisas. Y por ese motivo, según el consejero, se ha tomado la iniciativa de trasmitir Tosca en el marco del Festival de Verano de la Comunidad y bajo el lema Ópera para todos. Las entradas del montaje de Núria Espert dentro del teatro también tienen precios populares, y van de los 6,50 euros a los 60. Ya el pasado octubre un millar de personas siguieron desde el mismo emplazamiento La Traviata.
Esta versión de Tosca fue estrenada el pasado enero en el Teatro Real con Daniela Dessi, Fabio Armiliato y Ruggero Raimondi en el primer reparto. En la reposición estos días se escuchan las voces de, entre otros, Isabelle Kabatu y Carol Vaness, como Floria Tosca; Franco Farina y Nicola Rossi Giordano, como Mario Cavaradossi, y Renato Bruson y James Morris, como el barón Scarpia. Concretamente, para la función de hoy se prevé la actuación de los estadounidenses Vaness y Morris, y la del italiano Rossi Giordano.
Debú de Espert en el Real
Ésta es la primera vez que una ópera de Espert, que ha dirigido otras en Londres, Bruselas o en el Liceo barcelonés, se ve en el coliseo madrileño. La también actriz ha preparado esta producción con la colaboración de la Asociación Bilbaína de Amigos de la Opera y dos habituales en sus trabajos, Ezio Frigerio, autor de la escenografía, y Franca Squarciapino, de los figurines.
Tan sólo hace cinco días, el pasado viernes, los amantes de la música pudieron también disfrutar gratuitamente de la música al aire libre en Madrid. En esa ocasión el lugar fue la plaza Mayor, y los asistentes, 6.000 (3.000 sentados). El motivo fue homenajear a las víctimas del 11-M con un concierto en el que sonó la Sinfonía número 3 Heroica, de Beethoven, de la mano de la Staatskapelle de Berlín bajo la batuta del director argentino Daniel Barenboim.
Precisamente Barenboim ha sido este año el gran ausente del Festival de Verano, que ha visto reducido su presupuesto a menos de la mitad respecto al año anterior, pasando de los 2,3 millones a un millón. Dentro del certamen se verán también Arias de zarzuela del siglo XVIII, El maestro de baile y otras tonadillas e Il trionfo del tempo e del disigagnno, de Händel.
* Este artículo apareció en la edición impresa del Miércoles, 14 de julio de 2004