Santaolalla -todo un personaje del rock latinoamericano: producciones para Maldita Vecindad o Bersuit, banda sonora de Amores perros, coproducción con Kronos Quartet...- lidera este colectivo de músicos del Río de la Plata cuyo nombre se inspira en el famoso proyecto anglocubano. ¿Tango drum n'bass? ¿Tango house? ¿Tango psicodélico? Si Gardel levantara la cabeza, dirán algunos ofendidos ante la osadía. No resulta fácil equilibrar beats y loops con violín y bandoneón. Menos aún hacerlo con dosis similares de respeto e irreverencia. En este caso dio la impresión de que la electrónica terminaba por fagocitar al genuino invento porteño. Que la música se dejó arrastrar por la máquina: más para aficionados a los dj's que para amantes del tango. Habrá que darle tiempo a este tango centenario, que toma acentos de trip hop o jungle, para saber si realmente hay vida después de Piazzolla.
Bajofondo Tango Club
Gustavo Santaolalla (guitarra, percusión), Juan Campodónico (DJ, programaciones), Luciano Supervielle (piano, DJ), Javier Casalla (violín), Martín Ferrés (bandoneón), Gabriel Casacuberta (contrabajo) y Verónica Loza (VJ). La Riviera. Madrid, 13 de julio.
Y se apareció Adriana Varela. Para cantar con voz cazallera Perfume. El concierto inauguró el ciclo Argentina en el corazón -lo completan la propia Varela, Charly García y León Gieco en el Conde Duque-, que destinará parte de los beneficios a la compra de vacunas para los niños argentinos.
* Este artículo apareció en la edición impresa del Jueves, 15 de julio de 2004