El gobierno local en el Ayuntamiento de Cádiz, del PP, quiere derribar cuanto antes la antigua Academia de Artillería, que se desplomó parcialmente el pasado 16 de enero causando la muerte de un menor de 15 años y heridas a otros dos. Los abogados del Consistorio han pedido al juez instructor autorización para proceder a demoler estas dependencias de propiedad municipal para poder acometer proyectos de zonas verdes y la ampliación del Hotel Parador Atlántico.
El concejal de Urbanismo, José Loaiza, justificó esta nueva petición al magistrado titular del juzgado de instrucción número 1 de Cádiz, Jorge Israel Bartolomé, después de que varios peritos municipales, independientes y judiciales hayan inspeccionado la estructura del edificio siniestrado.
El juez no autorizó el derribo de estas instalaciones días después del accidente mortal aduciendo que era necesario analizar a fondo el estado de conservación del edificio. Según Loaiza, la petición de ahora se sustenta en el informe emitido por un perito judicial que no aprecia estado de ruina del edificio que se derrumbó sobre los tres menores. Estas observaciones, según el PP, apoyan las tesis municipales de que el edificio se derrumbó por causas externas, como que los chicos tiraron piedras sobre las paredes del inmueble.
El juez Bartolomé ha imputado recientemente al teniente alcalde de Patrimonio, José Blas Fernández, y al secretario municipal, Antonio Ortiz, como presuntos autores, respectivamente, de sendos delitos de homicidio por imprudencia grave, y encubrimiento al no facilitar supuestamente algunos informes relacionados con este siniestro que solicitó para la instrucción del caso.
* Este artículo apareció en la edición impresa del Sábado, 17 de julio de 2004