¿Alguien es capaz de salir a la palestra y explicar qué está pasando en Punta? ¿El alcalde? ¿La concejal? ¡Que va! Están como los avestruces, o como los perros con el rabo entre las patas, asustados de lo que se les ha venido encima. Echaron vilmente a Paco Cazorla de la Jefatura de la Policía Local y bien que lo están pagando. Bueno, ellos no, el pueblo y el veraneante. Esas vendettas políticas no conducen a ninguna parte. Cazorla lo haría más o menos bien, pero había seguridad y policías en la calle. El que está ahora, si es que lo hay, lo está haciendo fatal. Por poner ejemplos, hay perros en la playa. ¡Perros! Eso no se veía desde los tiempos de los ingleses. Y no están en zonas apartadas, no. Delante de las Tres Marías, en Miramar, en Calipso, en Everluz, en todos sitios. Pero como no hay vigilancia... Y hay partidos de fútbol. Y hay peleas organizadas y premeditadas, a las nueve de la noche, desde Caracoles al Garito, al lado de donde vive el alcalde. Pero como nadie pone orden... Y hay asaltos y roturas de cristales y robos en el mismísimo paseo de la ría.
* Este artículo apareció en la edición impresa del Jueves, 22 de julio de 2004