Eduardo Chillida Belzunce inauguró ayer Al otro lado, un mural pintado en un edificio protegido de la Parte Vieja de San Sebastián con el que abre una ventana artística a la Bahía de la Concha. Chillida ha recreado así a gran escala y en terracota la temática que lleva años trabajando sobre lienzo. El mural, de 9 metros de alto y 3,5 de ancho, ha sido sufragado por el Ayuntamiento, que cumple así con la condena que le impuso el Superior de Justicia vasco -invertir 180.303 euros en patrimonio arquitectónico- por propiciar el derribo de una fachada romántica al conceder una licencia de obra ilegal.
* Este artículo apareció en la edición impresa del Viernes, 23 de julio de 2004