El AVE Madrid-Sevilla que parte a las 21.00 de la capital tuvo que ser detenido y desalojado en Córdoba al descubrirse en uno de sus vagones dos paquetes con inscripciones en árabe y que contenían arena en su interior, como se comprobó posteriormente, según informaron fuentes policiales.
Dichas fuentes atribuyeron este hecho a una "broma de pésimo gusto", dados los atentados del pasado 11 de marzo, en los que murieron 191 personas y unas 1.500 resultaron heridas.
Los hechos ocurrieron cuando en uno de los vagones del AVE se localizaron dos paquetes que, según las citadas fuentes, llevaron a detener el tren en Córdoba y desalojar a sus pasajeros.
Al lugar acudieron efectivos de especialistas en desactivación de explosivos (Tedax), que finalmente comprobaron que los paquetes sólo contenían arena.
* Este artículo apareció en la edición impresa del Domingo, 25 de julio de 2004