Los dos máximos exponentes del zaplanismo, o sea, Serafín Castellano, portavoz del Grupo Parlamentario Popular, y José Joaquín Ripoll, presidente de la Diputación de Alicante, dejaron ayer claro que una cosa es la intrahistoria del PP valenciano y otra la organización en su ámbito estatal. En este último aspecto ambos despejaron cualquier duda acerca de su apoyo al líder nacional, Mariano Rajoy, y rechazaron que el plante de diputados autonómicos del PP a Camps sea un "desafío" a Rajoy, que ya ha apostado públicamente por el liderazgo del titular del Consell.
Con todo, el análisis de Ripoll y Castellano difiere del realizado por otros líderes del PP, entre ellos, la alcaldesa de Valencia, Rita Barberá, para quien el plante si fue un desafío a Rajoy.
"El apoyo de todo el PP valenciano a Mariano Rajoy es incuestionable. Es poco leal y poco responsable querer utilizar el nombre del secretario general del partido en beneficio propio", dijo Castellano. El presidente de la Diputación de Alicante fue más lejos y tildó de "tontería" decir que la ausencia de los diputados populares es un pulso a Rajoy: "En la Comunidad Valenciana, y concretamente en Alicante, todos estamos a favor de Rajoy. Sobre todo los que hemos trabajado para que fuera el presidente del partido y del Gobierno español", argumentó el también secretario general del PP valenciano.
* Este artículo apareció en la edición impresa del Sábado, 31 de julio de 2004