La alcaldesa de Pamplona, Yolanda Barcina (UPN), pidió ayer a los ocupantes del frontón Euskal Jai que antepongan los intereses generales a los particulares y desalojen las instalaciones que convirtieron en gaztetxe hace diez años y recientemente han abierto al público. Acompañada del portavoz de CDN Luis Ibero, la alcaldesa presentó el proyecto deportivo que el Ayuntamiento, actual propietario del viejo frontón, ha diseñado para los vecinos del centro histórico de la ciudad. Con un presupuesto de cuatro millones de euros, el plan contempla 4.500 metros cuadrados de instalaciones deportivas.
Ibero (CDN) recalcó que el viejo frontón Euskal Jai deberá ser derribado debido a su ruinoso estado. Barcina señaló que el proyecto se negociará con los colectivos sociales del barrio y añadió que los jóvenes ocupantes del gaztetxe podrán participar en esas negociaciones si desalojan pacíficamente las instalaciones. Según Barcina, los actuales gestores del gaztetxe tienen opciones de conseguir sus objetivos si siguen los cauces legales y contactan con el Ayuntamiento para ser tratados "en igualdad de condiciones" con los demás jóvenes de Pamplona. El suministro de energía eléctrica al frontón fue cortado ayer bajo protección policial.
* Este artículo apareció en la edición impresa del Miércoles, 4 de agosto de 2004