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CARTAS AL DIRECTOR

Aclaración de Renfe

En relación con la carta titulada "Renfe y la compra por Internet" que aparece publicada en la edición del día 10 de agosto del diario que usted dirige, querría realizar algunas concreciones relacionadas con la seguridad financiera de la operación para el cliente.

El sistema de compra que Renfe ha establecido a través de Internet pretende facilitar la adquisición de los billetes a nuestros clientes. Así, los viajeros pueden acceder a los trenes de Grandes Líneas y de Regionales simplemente con el localizador que se les facilita al realizar la compra en el sistema "Tiknet" (venta por Internet), mientras que facilitando este localizador en control de acceso del AVE se obtiene directamente el billete para acceder al tren.

Existe una excepción: la primera vez que el cliente realiza una operación por este sistema en la que se solicita expresamente la presencia física del propietario de la tarjeta en una taquilla de Renfe, a fin de autentificar su identidad y como garantía financiera para el mismo. Esta debió ser la situación en la que se encontró la señora Carmen Sebrango Sadía, firmante de la carta, aunque no hace una referencia explícita a que fuera su primera vez.

Esta medida ha sido adoptada por Renfe en cumplimiento de las normas internacionales existentes para realizar cualquier venta con tarjetas de debito/crédito a fin de evitar fraudes financieros y ofrecer las mayores garantías para nuestros clientes. El hecho de que otras compañías no las cumplan no es motivo para que Renfe deje de hacerlo. No obstante, insisto en que esta circunstancia se produce exclusivamente en la primera ocasión en la que el cliente utiliza el sistema "Tiknet" y en que a partir de esa ocasión el viajero puede acceder al tren sin siquiera necesitar el billete físico.

Por otra parte, lamentamos el tiempo de espera que la señora Sebrango tuvo que soportar, que, sin duda, tiene que ver con las fechas en las que nos encontramos, en las que los desplazamientos de los ciudadanos por motivos vacacionales hacen que las taquillas de nuestras estaciones cuenten con mayor afluencia de viajeros.

* Este artículo apareció en la edición impresa del Jueves, 12 de agosto de 2004