El Gobierno de Estados Unidos instó ayer a Rusia a que resuelva su lucha judicial contra el gigante petrolero Yukos -cuya crisis está influyendo en el alza del petróleo- ajustándose a la legalidad y sin dejarse influir por consideraciones externas de carácter político. "Todas las partes deben encontrar una solución que resuelva este caso de acuerdo con la ley y con el debido proceso, sin influencia de consideraciones políticas", declaró en rueda de prensa un portavoz del Departamento de Estado, Adam Ereli.
"La aparente falta de un proceso debido y la amenaza a los derechos de propiedad privada" ha puesto en guardia a los empresarios de la comunidad internacional y de Rusia, dijo.
* Este artículo apareció en la edición impresa del Viernes, 13 de agosto de 2004