En el patio interior de lo que en los ochenta era la discoteca Oh! Madrid, se ha abierto este verano la recoleta terraza Ylang Ylang, un reducto en la cada vez más larga lista de espacios madrileños con aire asiático.
Ylang Ylang es en realidad una instalación más del complejo hostelero Buddha del Mar, levantado bajo inspiración budista en esa antigua mansión residencial que desde primeros de este año es además restaurante, discoteca y pub. La terraza también sirve delicada comida oriental a mediodía y primeras horas de la noche; pero cuando su cocina cierra, a eso de la una de la madrugada, se transforma en un espacio para copas y charlas reposadas. La intimidad y la tranquilidad lo da, entre otras cosas, el estar situado al lado contrario de la carretera de A Coruña, a cuya vera se asienta toda la casona.
Por donde quiera que se mire, se ve el Asia más lejano, merced a esa decoración de estructuras de maderas de teca, lonas, cascadas de agua y bambúes. Lamparitas, velas, celosías, sedas y la imagen de un Buda siempre presente invitan a la reflexión, a la que ayuda una música relajante entre el chill out y el lounge elegante.
En un agosto tormentoso y fresco que está siendo especialmente ingrato para muchas de las terrazas de la ciudad, Ylang Ylang resulta un lugar acogedor que además juega la baza de los aromas. Entre el incienso, los sándalos, la madera y las flores, Ylang Ylang quiere recordar que su nombre está sacado de una de las plantas más utilizadas en Oriente para la elaboración de perfumes.
Ylang Ylang. Carretera de A Coruña, Punto kilométrico 8,700. Reservas: 91 357 29 07. Abre a diario de 14.00 a 16.30 y de 21.00 a 6.00. Entrada: 15 euros (con copa).
* Este artículo apareció en la edición impresa del Viernes, 20 de agosto de 2004