El empresario español Joaquín Franco Pérez, de 35 años, directivo de Recreativos Franco detenido el pasado día 19 en el Estado de Arizona, suroeste de Estados Unidos, se declaró ayer "no culpable" ante el tribunal que sigue su caso por siete cargos, incluido el de soborno a un funcionario. El juez del Tribunal Superior del condado de Maricopa dejó a Franco en libertad bajo fianza de un millón de dólares (800.000 euros) y fijó para el próximo 5 de octubre una reunión entre la acusación y la defensa en la que se decidirá la fecha del juicio, según explicó a Efe una portavoz de la fiscalía de Arizona.
Franco es acusado de sobornar a un inspector del Departamento de Juegos de Azar de Arizona, de cambiar o destruir miles de archivos informáticos y de malversar fondos de una compañía de juegos de azar con la que Recreativos Franco estudiaba fusionarse, por lo que podría enfrentarse a una pena de 15 años de prisión.
En relación con el caso, la empresa citada aseguró ayer que está presente en EE UU desde 2002 a través de Recreativos Franco USA, informa Europa Press. Indicó también que "a día de hoy" ya cuenta con licencias en el mercado estadounidense y para su obtención se ha sometido "a una profunda inspección por parte de las autoridades competentes, habiendo cumplido satisfactoriamente todos los requerimientos". Respecto a la acusación contra su directivo, la compañía indicó que "hasta ahora lo único que se ha producido es una imputación de la Fiscalía".
* Este artículo apareció en la edición impresa del Jueves, 26 de agosto de 2004