La cantante aragonesa Carmen París lleva todo agosto encerrada en los estudios Sonoland, en las afueras de Madrid, para dar forma a su segundo álbum, un trabajo de vocación ecléctica que se titula Jotera lo serás tú y que llegará a las tiendas este próximo otoño. París ha escogido al percusionista Tino di Geraldo -especializado en jazz y flamenco- para afrontar el reto de mejorar las cifras de su sorprendente debut, Pa' mi genio (2002), un trabajo de jota aragonesa y sonoridades étnicas que despachó casi 40.000 ejemplares.
París, nacida en Tarragona pero zaragozana de adopción, se ha rodeado de un variopinto elenco de colaboradores para dar forma a este segundo disco. Por los estudios madrileños han desfilado desde el folclorista vallisoletano Eliseo Parra a los guitarristas flamencos Juan Manuel Cañizares y Dieguito el Morao, el percusionista Luis Delgado o el acordeonista guipuzcoano Joxan Goikoetxea, del grupo Alboka. La última en hacer acto de presencia es la rockera Mercedes Ferrer, que canta y toca la guitarra eléctrica en un tema a lo George Harrison en clave hindú, Revelación. "Empezó siendo una adaptación de Within me without you, pero al final ha cobrado vida propia", confiesa París mientras repasa la letra, que escribe a lápiz en un cuaderno con portada de Edward Hopper.
Los cigarrillos herbales mezclados con otras sustancias menos inocuas espesan ese ambiente noctívago y subterráneo de las grabaciones, pero la actividad no se interrumpe. Di Geraldo pasea descalzo mientras formula sus deseos. "Ahí hace falta algo de percusión" o "vamos a quitar esos teclados", propone.
Once temas -10 originales y una versión de Ave del paraíso, de Javier Ruibal- darán forma a este trabajo, que ahora empieza a mezclarse en los estudios barceloneses de Marc Parrot. Lo de Jotera lo serás tú constituye un homenaje indisimulado a Flamenco lo serás tú, el álbum en solitario que Di Geraldo publicó en 1998. Y el tema central, con un estribillo muy contagioso ("Jotera lo serás tú. Anda, díselo a tu madre, que a mí no me duelen prendas..."), sirve como declaración de intenciones. "Es una especie de cuplé-ranchera-chotis con un final casi de salsa", apunta la autora. El ingrediente más aragonés está presente en Chavalica, un delicioso dúo con Eliseo Parra que se inspira en Los chopos de la ribera, una de las muchas jotas que Carmen aprendió de su padre.
* Este artículo apareció en la edición impresa del Jueves, 26 de agosto de 2004