Castigado por la combinación de los ataques sobre su historial en Vietnam y por la carga de la brigada republicana en la convención de Nueva York, el candidato demócrata a la presidencia, John Kerry, necesita frenar la ascensión de George Bush, su contrincante, en los sondeos. Por eso, la campaña demócrata gastará 50 millones de dólares (41,5 millones de euros) en anuncios televisivos en las próximas ocho semanas.
La primera parte de esta ofensiva se centrará en siete de los Estados clave, entre ellos Florida, Ohio, Pensilvania y Wisconsin. Los anuncios se centrarán en la economía y dirán que Kerry es el que mejor puede defender a las clases medias.
Mientras, el grupo Veteranos por la Verdad, que tanto daño ha hecho a Kerry con sus anuncios en los que se cuestionan sus méritos y medallas en Vietnam, ataca de nuevo. En lugar de limitarse a los mercados televisivos de tres Estados, el grupo se anuncia ahora en todo el país en tres cadenas de cable y en el History Channel, muy visto por veteranos y personas mayores.
El nuevo anuncio contrasta símbolos -la bandera, monumentos de Washington- con imágenes de la manifestación del 23 de abril de 1971 ante el Capitolio en la que el joven Kerry tiró las cintas de sus medallas. Los Veteranos por la Verdad dicen haber recaudado 2,5 millones de dólares (unos dos millones de euros) en las últimas tres semanas.
La tardía y, para algunos, insuficiente respuesta a estos ataques, que le ha costado a Kerry perder la ligera ventaja que tenía en los sondeos a mediados de agosto, es uno de los elementos que se citan para justificar posibles cambios en el equipo de campaña de Kerry. Un miembro del Comité Nacional Demócrata dijo ayer a EL PAÍS que "no habrá grandes cambios", pero añadió que "en cada campaña, al abordar la recta final se suman personas de mayor experiencia", dejando abierta la posibilidad de que el candidato demócrata tome decisiones para configurar un equipo de campaña al menos tan agresivo y eficaz como el que apoya a los republicanos.
* Este artículo apareció en la edición impresa del Viernes, 3 de septiembre de 2004