La restauración del Retablo de los Evangelistas, uno de los tesoros artísticos de la Catedral de Sevilla, ha concluido. La consejera de Cultura, Rosa Torres, y el cardenal arzobispo de Sevilla, Carlos Amigo, presentaron ayer el resultado del trabajo realizado por el Instituto Andaluz del Patrimonio Histórico. El retablo, que consta de 10 pinturas y data del siglo XVI, es obra del pintor flamenco Hernando de Esturmio.
El retablo (en madera dorada y policromada y de grandes dimensiones) está formado por 10 pinturas. Se trata de Santa Justa y Santa Rufina, San Sebastián, San Juan Bautista y San Antón y Santa Bárbara y Santa Catalina, en la parte inferior; San Lucas, Misa de San Gregorio y San Marcos, en el primer cuerpo; San Juan, Resurrección de Cristo y San Mateo, en el segundo cuerpo; y Espíritu Santo, en el ático.
El Instituto Andaluz del Patrimonio Histórico ha dedicado 30 meses a la restauración del retablo con una inversión de 127.970 euros. Esta obra artística "presentaba un avanzado estado de deterioro y secuelas de desafortunadas intervenciones anteriores", según señala la Consejería de Cultura en un comunicado. El acuerdo de colaboración firmado entre Cultura y el Cabildo de la Catedral de Sevilla hizo posible la labor de rehabilitación. La Junta aportó un tercio del presupuesto, mientras que el resto fue sufragado por el Cabildo, que ha instalado asimismo una nueva iluminación en la capilla que guarda esta obra de arte.
Torres hizo ayer hincapié en el enorme valor de "esta obra maestra". "No es nada común encontrar una obra de estas dimensiones y en este estado de conservación", comentó la consejera de Cultura. Por su parte, el cardenal recalcó que los restauradores "han devuelto el alma a este retablo".
* Este artículo apareció en la edición impresa del Sábado, 11 de septiembre de 2004