Alrededor de un centenar de vecinos y comerciantes del mercado de Santa Caterina se manifestaron anoche desde las inmediaciones del mercado hasta la sede del Ayuntamiento, en la plaza de Sant Jaume, para protestar por el retraso de las obras del mercado. Los manifestantes, provistos de sartenes y silbatos, exigieron que el mercado abra el próximo 25 de noviembre, día de Santa Caterina, como estaba previsto inicialmente por el Ayuntamiento.
El consistorio se compromete a terminar las obras del mercado para el día de Santa Caterina, pero los tenderos dicen que precisan entre tres y cuatro meses más para montar las tiendas. Las obras de las calles tampoco estarán concluidas en su totalidad, sino sólo las de las que dan al mercado.
Carmelo Sánchez, que regenta un comercio en la zona, afirmó: "No aceptamos más retrasos. Las calles están levantadas y las tiendas no venden. Llevamos casi seis años así y muchas tiendas han tenido que cerrar o ceder el negocio". La protesta es a título individual y no tiene el respaldo de las asociaciones de comerciantes y de vecinos. Los afectados esperan la reunión convocada por el Ayuntamiento el próximo jueves para decidir si siguen con las protestas.
* Este artículo apareció en la edición impresa del Sábado, 11 de septiembre de 2004