La trainera cántabra de Astillero pulverizó ayer el récord de la regata de la Concha, que ostentaba Donibaneko desde 1995, y volvió a ganar la tanda de honor superando en siete segundos a Urdaibai. La trainera vizcaína presentó una impugnación, que no fue atendida por los jueces, al considerar que Astillero había invadido su calle expulsándole de la misma. Los jueces consideraron que dicha invasión no afectó en ningún momento el transcurso de la regata, al producirse siempre con ventaja suficiente. En la fotografía, el patrón de Astillero, Izortz Zabala, ondea la Bandera de la Concha junto a sus seguidores.
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* Este artículo apareció en la edición impresa del Lunes, 13 de septiembre de 2004