Aunque parezca mentira, ya en pleno siglo XXI, nuestro querido barrio de Heliópolis, sigue reclamando soluciones a la seguridad ciudadana, infraestructuras, limpiezas, arbolados, que son desoídas una y otra vez por los organismos públicos, entre ellos, el alcalde de nuestra ciudad.
A principio de este año intervine en un Pleno del Ayuntamiento de Sevilla, en el apartado de ruegos y preguntas, y en calidad de presidente de nuestra Asociación de Vecinos Los Andes. Denuncié, entre otras cosas, la deficiencia en caso de un incendio. Durante este pasado mes de agosto ha habido dos incendios que han podido ocasionar una catástrofe en nuestras casas y todo por la desidia del alcalde y del delegado de Urbanismo, por no mantener los terrenos aledaños a nuestro barrio limpios y en buen estado.
El último de ellos, que se produjo en la calle Ifni, junto al polideportivo, y en el que actuaron muy profesionalmente los bomberos, pudieron comprobar in situ que carecemos de tomas de agua para extinción de incendio según marca la ley, teniendo que traer camiones con depósitos de agua para aplacarlo. ¿Se figuran lo que hubiera ocurrido caso de haber sido el fuego en alguna de nuestras casas? Quizá algunos de nosotros hoy estaríamos lamentándonos de los malos gobernantes que tenemos y que no cumplen con su obligación.
Espero que estas líneas sirvan para hacer reflexionar a esa clase dirigentes, para que no se olviden del barrio de Heliópolis y de sus vecinos.
* Este artículo apareció en la edición impresa del Miércoles, 22 de septiembre de 2004