El ex presidente del Gobierno, José María Aznar, dio ayer su conferencia inaugural en la Universidad de Georgetown, en un salón de actos lleno de estudiantes -aunque no rebosante- que le aplaudieron en varias ocasiones. Aznar habló -por primera vez en público en inglés, con ciertas dificultades de pronun-ciación- sobre la amenaza del terrorismo. "La victoria es posible", repitió en varias ocasiones el presidente del PP, "si entendemos con qué nos estamos enfrentando".
Ante algo más de 500 personas y tras la elogiosa presentación del rector, desgranó sus tesis: para derrotar a los terroristas hay que aceptar que estamos en guerra, declarada por Bin Laden "que dijo que no caben ni negociaciones ni acuerdos de paz"; el apaciguamiento no es una opción, ni tampoco la contención, "porque el terrorismo islamista no reconoce ni respeta fronteras", "es una ideología cuyas raíces son el odio a la modernidad y a los valores occidentales".
Para Aznar, "el frente central de la guerra contra el terrorismo está en Irak", y para combatirlo hace falta una cooperación global, no limitarse a "repetir la vieja letanía de nuestros intereses y valores comunes". "Los terroristas consiguieron una victoria con su atentado en Madrid y la posterior retirada de tropas de Irak, pero fue sólo una victoria parcial", aseguró, para advertir: "Ahora querrán influir en las de EE UU, directamente o indirectamente, a través de Irak. No les dejemos creer que pueden salirse con la suya", concluyó entre aplausos.
Aznar, que había bromeado sobre el inglés -"un amigo me dijo que hablara en español, pero si Schwarzenegger puede hablar con su peculiar acento, yo aún tengo esperanzas"-, se empeñó en aceptar y responder también en inglés las preguntas. En algunas respuestas se puso en evidencia que o bien no había entendido correctamente o bien prefería no responder. La sexta y última cuestión -"¿por qué apoyó la guerra, si el 90% de los españoles estaban en contra?"- levantó los aplausos de un amplio grupo de estudiantes. En su respuesta, Aznar dijo que a nadie le gusta la guerra y que "la mayoría de los españoles también están en contra del terrorismo, porque lo conocen bien". En la conferencia, Aznar había hecho varias referencias a ETA -"no hay terroristas buenos y malos, el nuevo terrorismo no elimina la amenaza del antiguo"- y había pedido que no se llamara a sus militantes separatistas, "porque sería como decir que Al Qaeda es un grupo religioso".
A la salida del acto, Aznar dijo estar "muy satisfecho" de la acogida. Entre los estudiantes, diversidad de opiniones. Andrea, norteamericana, celebró "la determinación de Aznar" y consideró "muy interesante" sus experiencias. En un pequeño grupo de españoles, la opinión era relativamente positiva: "A mí me ha gustado, porque ha sido directo y determinado, aunque un poco agresivo", dijo Miguel, estudiante de Finanzas.
* Este artículo apareció en la edición impresa del Miércoles, 22 de septiembre de 2004