Los tres grupos municipales de la oposición -PP, IU y PA- en el Ayuntamiento de Vejer de la Frontera (Cádiz, 13.000 habitantes) han solicitado formalmente la celebración de un pleno extraordinario para que el alcalde Antonio Jesús Verdú, del PSOE, ofrezca explicaciones sobre el "desgobierno y la parálisis de la actividad municipal" que, según denuncian, sufre este Consistorio desde el comienzo de este mandato.
El PSOE de Vejer está actualmente dividido en dos corrientes: los que apoyan al alcalde y los que se alinean con la dirección del PSOE de Cádiz. La ruptura se produjo cuando el presidente de la Diputación gaditana, Francisco González Cabaña, nombró diputada provincial a una edil de Vejer en lugar de al alcalde. Desde entonces, Verdú ha mantenido un pulso con la dirección del PSOE al no otorgar responsabilidades de gobierno a algunos ediles que apoyan al provincial. Esto ha provocado que el alcalde y el resto de sus ediles afines asuman un elevado número de delegaciones. Además, una gestora ha asumido el mando del partido desde hace dos meses.
Para la oposición, el "desgobierno" de Vejer, se evidencia en tres hechos "muy peligrosos": están proliferando construcciones ilegales en El Palmar; no hay presupuestos y no se afronta la elevada deuda municipal.
* Este artículo apareció en la edición impresa del Jueves, 23 de septiembre de 2004