Estudio de Revaz Tavariani.
Kolmeurne, 1977.
Prepárese el lector para una fuerte impresión. Si no fuera por el peón de c6, a las blancas les resultaría imposible ganar. La captura en f7 sería contestada con un millón de jaques; y 1 c - d7 sólo sirve para perder el final de damas, ya que seguiría 1... Dd4+. Por eliminación, no puede haber nada mejor que el avance. Vamos allá, y luego ya veremos: 1 c7, D - a3+ 2 Re4 (retroceder garantiza el empate por jaque continuo, como se aprecia en esta variante, una entre muchas posibles: 2 Re2, Db2+ 3 Rf1, Db1+ 4 Rf2, Db2+ 5 De2, Dd4+ 6 De3, Db2+ 7 Rg1, Db1+ 8 Rh2, Dc2+ 9 Rh3, Df5+ 10 R - h4, d5 11 De8+, Rh7 12 c8=D -o bien 12 g6+, f - g6, y tablas- 12... Df4+ 13 Dg4, Dh2+ 14 Dh3, Df4+, tablas) 2... d5+ (aprovechando que la dama blanca está atacada, se despeja la importante diagonal c8-h3; además, no valía 2... Db4+ por 3 Rf5, Db1+ 4 Rg4, Db4+ 5 Rh5, y las blancas ganan porque se acabaron los jaques) 3 Rf4, h - g5+ (no es suficiente 3... Dc1+ por 4 Rg4, D - g5+ 5 Rh3, Dg8 6 Df6+, Rh7 7 Df5+, ganando; ni 3... Db4+ por 4 Re5, Db7 5 Df6+, Rg8 6 Dd8+, ganando) 4 Rg4, f5+ (el asunto se ha puesto muy serio: si ahora 5 D - f5 seguiría Dg3+ y D - c7, y las negras ganan. De pronto, las blancas parecen perdidas. Sin embargo, hay un recurso muy oculto, una joya que sólo las mentes muy imaginativas y sin prejuicios pueden descubrir. Sabemos que el rey necesita protección casi siempre, pero también que a veces se transforma en un arma de ataque mortal. Fíjese el lector en el rey negro arrinconado, el blanco no muy lejos, y el peón a punto de coronar. ¿Alguna idea?) 5 Rh5!!, D - f3+ 6 Rg6, y las blancas ganan porque la única manera de evitar el mate es entregar la dama en h5.
* Este artículo apareció en la edición impresa del Sábado, 25 de septiembre de 2004