El Ayuntamiento de Valencia "perderá" unos 3,2 millones de euros por problemas en la notificación de las multas registradas en 2003, bien porque ésta se realizó fuera de plazo o bien porque se hizo de forma incorrecta, según aseguró ayer la concejal de Esquerra Unida (EU) María Victoria González. Según la auditoría interna del Consistorio correspondiente a 2003, las multas de tráfico alcanzaron un valor de 9,58 millones de euros, aunque sólo se recaudaron 3,08 millones, lo que supone un 32,22%.
Sin embargo, el mismo informe recoge, según la concejal, que se anularán por prescripción automática -por no haberse hecho la notificación dentro del plazo previsto- 46.406 multas, lo que supone 2,6 millones de euros, mientras que otras 11.645, que representan 631.000 euros, serán anuladas porque la notificación está a nombre de una persona jurídica.
González aclaró que las infracciones de tráfico deben notificarse a la persona que las comete, de manera que si se trata de un vehículo de empresa o de alquiler quien gestiona las multas debe informarse de quién conducía del vehículo y mandarle a él la multa. En este sentido, instó al Ayuntamiento a que "obligue" a la empresa Tribugest, que es la encargada de la notificación y cobro de las multas de tráfico, a notificar dentro del tiempo legal o que la penalice.
* Este artículo apareció en la edición impresa del Viernes, 1 de octubre de 2004