Un movimiento sísmico de baja intensidad que se prolongó durante unos cinco segundos, a las 20.07 horas de ayer, afectó a varias localidades de la comarca barcelonesa del Maresme. Según los primeros datos adelantados por el Instituto Cartográfico de Cataluña, el seísmo fue de entre 2,3 y 2,5 grados en la escala de Richter y el epicentro estaría situado a unos 10 kilómetros mar adentro a la altura de la localidad de Caldes d'Estrac. Por su parte, el Instituto Cartográfico Nacional elevó la intensidad hasta 3,1 en la misma escala y situó el epicentro en el mar, a una distancia de unos cinco kilómetros en el mismo frente marino.
Los Bomberos de la Generalitat desplazaron equipos técnicos a la zona y no evidenciaron nungún daño. Este seísmo se produce a los pocos días de otro de magnitud 4,1 que se produjo el pasado 21 de septiembre con epicentro en la población de Queralps, en la comarca del Ripollès, que se percibió en gran parte de Cataluña y que durante varios días siguió manifestándose en menor escala con diversas repeticiones.
* Este artículo apareció en la edición impresa del Martes, 5 de octubre de 2004