La justicia electoral condenó ayer al presidente brasileño, Luiz Inácio Lula da Silva, a pagar una multa de 50.000 reales (17.000 euros) por haber pedido el voto para la candidata de su partido y alcaldesa de São Paulo, Marta Suplicy, que se se enfrenta en segunda vuelta a José Serra.
Lula se desplazó a São Paulo el 18 de septiembre para inaugurar unas obras públicas y allí pidió el voto para Suplicy. La justicia electoral ha considerado que "hubo un manifiesto acto de propaganda electoral en favor de la candidata Marta Suplicy en acto público, costeado por el erario municipal".
Lula alegó que se había tratado de una improvisación en su discurso "movido por la emoción", tratándose de una candidata amiga suya. Ayer no hubo reacción oficial a la sentencia, que puede ser recurrida.
* Este artículo apareció en la edición impresa del Sábado, 9 de octubre de 2004