Seis personas, tres de ellas niños, murieron entre el jueves y el viernes en Afganistán en dos ataques distintos, en el inicio del mes del Ramadán y cinco días después de las primeras elecciones democráticas de su historia. Al menos tres niños y un policía afgano fallecieron víctimas de una bomba en la provincia oriental de Kunar. En otro incidente, dos soldados estadounidenses murieron y otros tres resultaron heridos al estallar una bomba al paso de su patrulla en la provincia de Uruzgan. El suceso de Kunar tuvo lugar el viernes por la noche, al explotar una bomba cerca de un vehículo estadounidense, previamente incendiado por partidarios de los talibanes.
El ataque en Uruzgan es el primero contra soldados estadounidenses tras las elecciones del pasado domingo, y eleva el número de víctimas militares en Afganistán a 102 desde la invasión del país a finales de 2001. El recuento de votos de las elecciones presidenciales podría llevar todavía entre una semana y diez días, según la autoridad electoral. Hasta ayer, menos de la mitad de las 25.000 mesas electorales había comunicado sus resultados, que suman casi cuatro millones de votos de un electorado total de 12 millones. De los 154.090 votos escrutados hasta ayer por la tarde, el 80% son para el actual presidente interino, Hamid Karzai.
* Este artículo apareció en la edición impresa del Domingo, 17 de octubre de 2004