El 25% de los anestesistas que se forman en Cataluña se marchan a otras comunidades para ejercer su profesión donde las condiciones laborales son mejores. Esta circunstancia agrava la endémica falta de anestesistas que padece la sanidad catalana. Así lo advierte un estudio de la Sociedad Catalana de Anestesiología, coordinado por el doctor Jaume Canet, que cifró ayer en un centenar el número de nuevos anestesistas que serían necesarios para afrontar las necesidades actuales y futuras de la sanidad catalana.
El Departamento de Salud no se plantea ofertar plazas de anestesiología en el extranjero, como hizo hace unos años, pero sí estudia una "redistribución de su trabajo", de manera que otros especialistas realicen funciones ahora reservadas a los anestesistas.
* Este artículo apareció en la edición impresa del Jueves, 21 de octubre de 2004