Christian Lindberg, el único trombonista que ha protagonizado una trayectoria en solitario, estrenó ayer junto a la Orquesta Sinfónica de Euskadi y al trompetista Ole Edward Antonsen en el Kursaal donostiarra Behac Munroh, que reivindica la personalidad creativa del compositor frente al intelectualismo de la música. Esta pieza, que grabará junto a la sinfónica vasca, forma parte de un programa que se repite hoy en el Euskalduna; el lunes, en San Sebastián; el martes, en Pamplona, y el miércoles, en Vitoria.
* Este artículo apareció en la edición impresa del Sábado, 23 de octubre de 2004