Un bebé de dos años falleció ayer al asfixiarse con un hueso de aceituna. Alrededor de las cinco de la tarde, los padres se presentaron con el pequeño en la comisaría del Cuerpo Nacional de Policía de Arganzuela, en la Ronda de Toledo. El estado del bebé era ya muy grave. El pequeño se había tragado una aceituna y se encontraba inconsciente, según informaron fuentes de Emergencias Madrid. En ese momento se encontraba en la comisaría una UVI móvil del Samur- Protección Civil. Los facultativos habían acudido a la comisaría avisados por la policía para atender a un detenido.
Inmediatamente, los médicos comprobaron que el niño todavía se encontraba con vida y consiguieron extraerle el hueso de aceituna utilizando unas pinzas especiales. A pesar de ello, el niño continuaba inconsciente.
A continuación iniciaron las maniobras de reanimación, al mismo tiempo que le trasladaron al hospital Niño Jesús. La reanimación duró unos tres cuartos de hora.
El bebé consiguió llegar con vida al centro hospitalario, pero allí tampoco pudieron hacer nada por salvarle la vida, y poco después falleció. Los psicólogos tuvieron que atender a los padres, que se encontraban muy afectados.
* Este artículo apareció en la edición impresa del Domingo, 24 de octubre de 2004