El Gobierno alemán, que había apoyado la firmeza de José Manuel Durão Barroso, hizo votos ayer por que su decisión de retirar el equipo de Gobierno permita ahora una rápida solución a la crisis abierta en la UE. "Tenemos que evitar un conflicto institucional y necesitamos una Comisión fuerte y capaz para comenzar a trabajar", dijo el canciller, Gerhard Schröder. Su ministro de Exteriores, el verde Joschka Fischer, pidió decisiones "rápidas, sabias y correctas" de todos los involucrados. Sobre el procedimiento concreto a seguir, Schröder y Fischer remitieron a las decisiones de la presidencia holandesa y a la misma Comisión Europea. Berlín, sin embargo, dejó claro que también en el nuevo equipo deberá tener cabida el socialdemócrata alemán y actual comisario para la Ampliación, Günter Verheugen.
* Este artículo apareció en la edición impresa del Jueves, 28 de octubre de 2004