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OPINIÓN DEL LECTOR

Semana de la Ciencia

En el número del 31 de octubre, J. A. A. escribe un buen artículo sobre la IV Semana de la Ciencia. El arranque del mismo, sin embargo, contiene una apreciación personal que motiva estas líneas. Se pregunta el autor, refiriéndose al sistema electrónico diseñado y fabricado por el Instituto contra la Violencia de Género, que "cómo un instituto con nombre tan poco evocador como es el de Instituto de Magnetismo Aplicado Salvador Velayos, de la Universidad Complutense, ha permitido que las mujeres amenazadas de malos tratos se encuentren más seguras". Con independencia del respetable contenido del artículo, permítaseme que como director del mencionado Instituto y como suscriptor y asiduo lector de EL PAÍS matice esta opinión del periodista. El Instituto, basándose en el trabajo callado y serio de sus investigadores, ha publicado en sus 15 años de andadura 300 artículos en las mejores revistas de física. Su número de contratos de investigación aplicada ha contribuido a que la Universidad Complutense alcanzara un reconocido prestigio entre las empresas más activas científicamente de la sociedad española e internacional. Cerca de cuarenta tesis doctorales se han realizado en el Instituto y un centenar de investigadores extranjeros han trabajado en sus laboratorios. Por otra parte, Salvador Velayos ha sido un reconocido maestro para varias generaciones de físicos, algunos de ellos habituales colaboradores de EL PAÍS, como Miguel Ángel Aguilar o Cayetano López, quienes podrían ilustrar al respecto a J. A. A. en el propio ámbito de su trabajo. Fue Velayos un hombre exquisitamente tolerante y de talla científica más que suficiente para merecer un profundo respeto intelectual.

Por fin, el magnetismo forma parte de una de las cuatro interacciones fundamentales de la naturaleza. En consecuencia, lo que resulta tristemente evocador del nivel medio de cultura científica de nuestra sociedad es el comienzo del, por otra parte magnífico, artículo de J. A. A.-

* Este artículo apareció en la edición impresa del Sábado, 6 de noviembre de 2004