Unos 80 manifestantes fueron detenidos por la policía chilena de Carabineros ayer, tras finalizar la marcha de unos 2.500 hinchas del Colo Colo que exigieron la intervención del Gobierno para impedir la venta del estadio del club, debido a la crisis económica que atraviesa. La marcha se desarrolló entre la Plaza Italia y el Palacio presidencial de La Moneda, en Santiago, y derivó en desórdenes cuando algunos grupos de hinchas se enfrentaron con agentes de la policía.
La policía recobró toda la parafernalia que le dio fama durante la dictadura de Pinochet: carros lanzaaguas y gases lacrimógenos para dispersar a los violentos. Fuentes de la policía informaron sobre la detención de 80 personas.
Los manifestantes, pidieron al Presidente Ricardo Lagos, ante el Palacio de La Moneda, que impida la venta del estadio Monumental de Colo Colo. Además, actos similares se registraron en distintas ciudades del país, donde los hinchas colocolinos rechazaron la venta del club. "¡Presidente, presidente, el estadio no se vende!", gritaban enfervorizados los integrantes de la Garra Blanca, una de las barras bravas del fútbol chileno. A 200 metros de la sede de Gobierno, los barristas con camisetas del club, banderas y lienzos, entonaron el himno del equipo durante una hora.
Hace diez días, la junta de acreedores del Colo Colo aprobó las bases para el remate de los bienes del club, el más popular de Chile. Los demandantes dieron curso al tramo final para la venta del Club Deportivo y Social Colo Colo, que se convertirá posteriormente en sociedad anónima. La subasta, prevista para enero, incluye los pases de los jugadores, con una postura mínima de 3.500 millones de pesos (unos 500.000 euros).
* Este artículo apareció en la edición impresa del Domingo, 7 de noviembre de 2004