Me gustaría que algún medio de comunicación se hiciera eco de los problemas que soportamos los usuarios de cercanías de Renfe, con motivo de la huelga que desde hace ya bastante tiempo llevan a cabo un sector de sus trabajadores.
Esta semana, en concreto, la huelga se ha producido los días 2, 3 y 4. Esta situación causa graves perjuicios a los usuarios: graves demoras en las salidas-llegadas de los trenes, falta de información, anulación de los trenes llamados Civis (más rápidos y orientados a personas que como yo vivimos a 50 kilómetros de distancia de la ciudad de Madrid), trenes con menos capacidad...
Es algo que los usuarios soportamos estoicamente sin que nadie nos ayude (ningún medio de comunicación ha informado acerca de estas huelgas).
Sabemos que la solución pasa, primero, por la reclamación, pero ¿cómo reclamar si el tren llega tarde y encima hay que invertir otros 20-30 minutos en dirigirse a la oficina pertinente de atención al viajero y redactar la reclamación? ¿Cómo se justifica eso en el lugar de trabajo?
Me gustaría que, por favor, algún medio de comunicación mostrara cómo estamos los usuarios de Renfe en hora punta en los andenes 1 y 2 de la estación de Atocha: es simple y verdaderamente inhumano y tercermundista, pero es una realidad que parece ser totalmente ajena a Renfe, a pesar de la tremenda desgracia que hemos vivido recientemente.
Muchas veces me pregunto si me encuentro segura entre tanta aglomeración y si verdaderamente han aumentado las medidas de seguridad. Espero y deseo que alguien nos preste atención, más allá de las cifras, las estadísticas y los datos.
* Este artículo apareció en la edición impresa del Domingo, 7 de noviembre de 2004