La forma en que se cuentan los hechos en los medios de comunicación, del mismo hecho de aparecer, de convertirse en noticia, implica ya, de antemano, su condena. Nunca debió ser noticia por sentarse en el banquillo de los acusados. El ciudadano que más se comprometió, el que más peleó, el que más se esforzó por encontrar el camino correcto, el que más escuchó a todo el mundo, el que más habló con todo el mundo, el que quiso salvaguardar los puestos de trabajo y defender los derechos del municipio por la explotación de las canteras, precisamente a él lo acusan de ilegalidades en el tratamiento del problema de las canteras de El Padul. Al que nos da el trigo lo acusamos de robarnos la cosecha. El mundo al revés. ¿Qué haremos para conseguir que la noticia no sea un alcalde nuestro en el banquillo de los acusados? ¿Recuerdan aquella otra vez, a aquel alcalde nuestro acusado por el asunto del PER? Y, ¡qué casualidad!, tanto uno como otro, alcaldes de Izquierda Unida (IU).
¿Qué haremos para conseguir que la noticia que propaguen los periódicos, las radios y las televisiones sea la verdad, par conseguir que todo el mundo, fuera de nuestro pueblo, sepa la verdad, es decir, sencillamente que Cipriano Duarte, ex alcalde de IU en El Padul, fue un alcalde ejemplar y fue y es un ciudadano ejemplar.
* Este artículo apareció en la edición impresa del Martes, 9 de noviembre de 2004