Desde Valencia quiero hacerles llegar el desespero del que somos presos hace unos días, cuando hemos escuchado que nuestra lengua, "el valenciano", va a ser incluido dentro del catalán, borrándolo del mapa.
En fin, yo como muchos valencianos vemos que se borra también nuestra identidad, pues tenemos nuestra propia lengua. Y quiero llegar más allá, para nosotros el canal autonómico catalán es muy difícil de seguir, también a los ciudadanos de Cataluña, y esto no debería de ser así si estuviéramos hablando de la misma lengua.
Soy una persona muy amante de las lenguas, y esto ha hecho que conozca muchas de ellas en profundidad. Y puedo decir que algunas veces por obligación he tenido que comprar libros en catalán, y más que leer lo que tuve que hacer fue "buscar en el diccionario". Si mi lengua materna fuera el Catalán a mi eso no me ocurriría.
Bueno quiero que nuestra voz unánime cruce la Frontera Española, y se oiga en Europa pues los valencianos siempre hemos confiado en la pluralidad de la Unión. Sin embargo, ahora, poniendo la lengua, con la que crecimos, con la que enlazamos nuestras primeras palabras, en tela de juicio, ponemos en peligro nuestra identidad, nuestro origen. La lengua es sentimiento, la lengua es la conservación de tu pasado. Si la borras, te anulas a ti mismo.
* Este artículo apareció en la edición impresa del Viernes, 19 de noviembre de 2004