La presidenta de la Acadèmia Valenciana de la Llengua, Ascensión Figueres, negó ayer que hubiera recibido presiones del Consell para frenar la ponencia sobre la denominación de la lengua, como han denunciado varios académicos, pero reconoció: "no voy a decir que no he hablado" estos últimos días con el consejero de Cultura, Alejandro Font de Mora. Éste se encontraba a su lado en el acto de presentación de la exposición Escriptors Valencians de l'Edat Moderna. La presidenta insistió en que dos académicos decidieron no firmar la ponencia ya consensuada y aplazarla porque les surgieron dudas, por lo que cambiaron su opinión favorable, una versión diferente a la sostenida por varios miembros de la AVL. Sobre la fórmula del Consejo de la Unión Europea, Figueres incidió en que lo importante es reafirmar la existencia del valenciano y que "esté en Europa", y que las fórmulas deben decidirlas "los políticos". Negó también división en el seno de la Acadèmia.
Por otra parte, ya son al menos 11 los académicos favorables a discutir en un pleno de la Acadèmia la citada ponencia de la denominación, lo que supone mayoría dentro de la institución, compuesta por 21 los miembros, si bien se persigue un dictamen futuro consensuado.
* Este artículo apareció en la edición impresa del Viernes, 19 de noviembre de 2004