La Comisión Europea reiteró ayer que la estructura accionarial acordada entre la Sociedad Estatal de Participaciones Industriales (SEPI) y los sindicatos para los astilleros civiles "plantea serias dudas" al tener un control público mayoritario, y añadió que los astilleros españoles deben afrontar "decisiones dolorosas", según dijo la portavoz de Competencia de la UE, Amelia Torres.
Tanto CC OO como UGT acusaron ayer de nuevo a la SEPI de usar a la Comisión Europea como pretexto para romper los pactos suscritos. Ambos sindicatos piden al Gobierno que se "implique directamente" en la búsqueda de una solución para Izar.
El presidente de la SEPI, Enrique Martínez Robles, señaló ayer que, "haya acuerdo o no con los sindicatos, la empresa entrará en causa legal de liquidación el 1 de enero al no poder devolver de su patrimonio los 1.200 millones de ayudas públicas", y por ello propone "segregar a corto plazo los militares para salvarlos de la liquidación global".
* Este artículo apareció en la edición impresa del Viernes, 19 de noviembre de 2004