Desde el 29 de octubre se habla mucho de traición, pillería, lealtad, delito, injerencia, insensatez, firmeza, despropósito, sensatez, trileros, vergüenza, chapuza, mediocres, radicales, chantaje... Contundentes abonos para una pretendida confusión a tres bandas (Madrid-Barcelona-Valencia).
Pues sepan que ya somos mayorcitos y lo tenemos muy claro: equivocarse es humano, pero unos lo hacen (lo hacemos) en defensa de aquello en lo que creemos y practicamos, y otros se equivocan defendiendo lo contrario de lo que en realidad piensan y, para más inri, no practican.
Ya lo dicen mis hijas: el plumero del PP, cuanto más lo agitan, más se les ve.
* Este artículo apareció en la edición impresa del Martes, 23 de noviembre de 2004