El portavoz del PSOE en la Asamblea, Rafael Simancas, afirmó ayer que el primer año de gestión de Esperanza Aguirre ha sido "el año de la confrontación institucional, de los conflictos sociales y de la propaganda a raudales". A su juicio, la presidenta regional ha demostrado además su "insensibilidad" y "falta de soluciones" respecto a los problemas de los ciudadanos.
Según Simancas, "un año después, las listas de espera [en los hospitales públicos] siguen siendo insufribles; la vivienda, un artículo de lujo; la precariedad se sigue instalando en el empleo; siguen faltando plazas educativas, y esta región sigue siendo la de los atascos". Subrayó que la "oferta estrella" de su programa electoral, la de reducir las listas de espera quirúrgicas, "lejos de ir cumpliéndose, va retrocediendo claramente".
Un año gris
Por su parte, el portavoz de IU en la Asamblea, Fausto Fernández, calificó ayer como "gris y de plomo" el primer año de mandato de Esperanza Aguirre, al tiempo que denunció que en estos últimos 12 meses la región ha experimentado "un retroceso en las libertades".
Fernández aseguró que la presidenta regional ha actuado como "una posesa" para "cargarse el Estado de bienestar" y ha conjugado esta determinación con "una especie de mirada nostálgica hacia el pasado" que, según Fernández, "nos retrotrae a hace 40 años".
"Aguirre ha suspendido y va camino de no recuperar ni en febrero, ni en septiembre, ni en los próximos años; esperemos que la pasen a la reserva en las próximas elecciones", apuntó el portavoz de IU, quien acusó a la presidenta de querer trasladar a Madrid el leitmotiv del ex presidente del Gobierno José María Aznar para asegurar que "Madrid va bien". "Sin embargo, Madrid no va bien desde que gobierna Aguirre", aseguró.
* Este artículo apareció en la edición impresa del Martes, 23 de noviembre de 2004